Hermosas aminovias.
Aunque todo desde el momento en que tomamos la decisión de casarnos y pasar toda la vida junto a nuestros amores es color de rosa, hay momentos en que surgen depresiones o dudas sobre los sentimientos, es esto normal?
Al parecer si y según expertos es llamado Síndrome Prematrimonial y tiene que ver con ese cambio trascendental que significa unirse para toda la vida. Muchas parejas son felices con la idea de casarse, hasta que se dan cuenta de las responsabilidades que incluye: separarse de los padres, tomar las decisiones juntos y no individualmente o incluso obsesionarse con el hecho de que tiene que ser una boda perfecta. Tanto es el estrés que puede generar una boda, que el matrimonio está entre las 10 situaciones más estresantes en la vida de una persona.
Para esto y si llegan a notar que su FE está un poco disperso, que ustedes están un poco más estresadas, iracundas o alteradas de lo normal, la recomendación de los expertos es calmarse y pasar un tiempo de calidad con la pareja y amigos, sin hablar del matrimonio. Un fin de semana en la playa, alejados del celular y sin pensar en las invitaciones que aún hay que entregar o en los proveedores que hay que pagar, todo esto puede ser suficiente para reflexionar sobre lo que se quiere, enrutarse en el porque decidieron casarse y poner las cosas en perspectiva.