Sería una locura privarse de ellos pudiendo comerlos sin ningún problema, ya que, son 0% grasa.
Ingredientes:
- Tres claras de huevo
- Cinco o seis cucharadas generosas de endulzante en polvo
- Unas gotas de esencia de vainilla
- 1 taza de crema de leche light
- 3 cucharadas de endulzante
- 2 tazas de pulpa de guanábana
- 1/2 taza de fresas cortadas en mitades
- 1/2 taza de duraznos
Preparación:
Por supuesto, todo comienza como con cualquier merengue: batiendo las claras a punto nieve. Para comprobar este momento, basta que estén tan sólidas, para probarlo, que las ponlas boca abajo y no se deben caer del recipiente.
Añade posteriormente el endulzante y continúa batiendo hasta que se mantenga todo sin perder la consistencia. Suma la esencia de vainilla.
Coloca la mezcla en una manga pastelera y, en una fuente para horno rociada con spray vegetal, comienza a colocar pequeñas porciones de la mezcla de merengue. Ten cuidado de separarlas entre sí, ya que van aumentar su tamaño.
Para cocinar, simplemente debes hacerlo a fuego bien bajo. ¿El tiempo? Entre 1/2 hora y cuarenta minutos, aproximadamente, hasta que estén dorados por fuera y cocidos por dentro.
Luego, sobre una bandeja coloca una capa de merengue, cubre con la mitad de la crema de leche y la mitad de la fruta. Coloca encima la otra capa de merengue y sucesivamente la crema y la fruta.
Decora con fresas y duraznos. Refrigera hasta el momento de servir.
Espero les guste, les confieso que es mi "pecadito" favorito.
