Cuando me casé, el año pasado, estuve buscando afanosamente un lugar dónde hacer nuestra recepción. Pues bien, contactamos un señor que se identificó como propietario del sitio Mirador Los Rosales (vía a La Calera), aunque tengo entendido que le ha cambiado varias veces el nombre del lugar en los últimos meses.
Para sorpresa mía mía, faltando dos meses y luego de haber abonado un 10% nos dijo que si queríamos realizar el evento era preciso un sobrecosto de ocho millones de pesos más. Al negarnos a algo tan absurdo y evidentemente abusivo, se negó a realizar el evento y durante algunos meses estuvo alguien llamando a nuestra casa a amenazarnos en nombre del famoso Mirador Los Rosales.
Me di a la tarea de investigar un poco más del tema, para poder llevar a cabo una acción judicial contra este señor y me llevo la sorpresa que no soy la única que he recibido quejas de este bárbaro. Inclusive hallé quejas de personas que dicen que en los baños de mujeres del lugar hay cámaras ocultas que graban constantemente con quien sabe qué fin.