Es un tiempo muy difícil que estamos viviendo y con mi prometido tenemos bastantes ilusiones con poder tener a nuestros amigos y familia de todas partes del mundo finalmente, todos reunidos festejando este momento tan importante para nosotros.
Nuestra boda está programada para el 15 de Junio, si Dios quiere.
¿Sera insensato seguir con los planes de la boda o deberíamos empezar a pensar en diferentes opciones?
Se ocultó el contenido
Para mostrar este contenido, por favor haz clic aquí